El actual proyecto de Rendición de Cuentas del Poder Ejecutivo plantea que las partidas presupuestales previstas para 2017 a la ANEP, la Universidad de la República y el INAU, sean pospuestas para 2018. Dicho monto es cercano a los tres mil millones de pesos.
El actual proyecto de Rendición de Cuentas del Poder Ejecutivo plantea que las partidas presupuestales previstas para 2017 a la ANEP, la Universidad de la República y el INAU, sean pospuestas para 2018. Dicho monto es cercano a los tres mil millones de pesos.
Si bien en un principio varias autoridades del gobierno y el Frente Amplio expresaron que fue producto de un mal entendido en las reuniones de diálogo de las últimas semanas y que podrían evaluarse modificaciones en los márgenes que no comprometieran las cuentas públicas finalmente Vázquez les pidió a los legisladores que entendieran el desencuentro y votaran la Rendición de Cuentas tal cual fue enviada al Parlamento, según expresan distintos medios de prensa el jueves 16.
Las propias autoridades educativas designadas por el gobierno también dieron su opinión, y dijeron que con estas pautas no se llegará a la promesa electoral de 6% del PIB para educación.
Esta promesa fue impuesta por las grandes luchas de la educación en los últimos años, en las que se exigía no solo llegar al 6% sino también que no sea a finales del quinquenio sino inmediato. Todo parece indicar que dependerá nuevamente de lo que puedan desplegar estos sectores educativos en las calles para lograr este reclamo.
En este marco de ajuste, otra vez se expresó el descalificativo a la profesión docente por parte de la Ministra de Educación María Julia Muñoz, que ya tiene un largo prontuario de declaraciones poco felices respecto a los profesores y maestros. Acaba de declarar a un medio de prensa que el ex director de Educación, Juan Pedro Mir, es "un maestro de escuela que no dio la talla para el cargo porque no estaba capacitado", descalificando así, una vez más, la profesión docente.
Recientemente el presidente Vázquez fue interpelado en la instancia abierta del último Consejo de Ministros, realizado en San Gregorio de Polanco, donde algunos niños pidieron la palabra para expresar las carencias edilicias y de distinto tipo en sus centros educativos. El presidente apeló a las autoridades de educación para que solucionaran cuanto antes los problemas planteados allí, pero lo cierto es que los problemas edilicios son generalizados en la educación pública como el sindicato docente de secundaria salió a denunciar en las últimas horas. Otra demostración de la necesidad de mayores recursos.
También se afectará la salud pública
Dentro de las postergaciones se encuentra la UdelaR donde distintos sectores manifestaron su disconformidad y anunciaron que esto afectará no solo a la educación sino a la investigación, con un recorte de 544 millones, y ASSE con un recorte de 250 millones. La salud pública en general y en particular el Hospital de Clínicas que depende de la UDELAR y que tiene convenios vigentes, y aún más previstos, con ASSE serán afectados fuertemente. Y que junto a la reducción en el presupuesto en la educación conforman dos sectores directamente vinculados a los intereses populares, a los que se les hace recaer el costo del ajuste.
Frenemos este ataque a la educación y la salud
Están previstos dos paros generales, uno parcial y el otro de 24 horas.
Si bien son muy dilatados en el tiempo y así la cúpula sindical oficialista le da más tiempo al gobierno para prever el escenario y ver si hace o no alguna concesión, está claro que los motivos para salir a luchar sobran. Y será importante que una gran multitud de trabajadores, de la salud, educación, junto a estudiantes, sean la expresión del rechazo al ajuste y al ataque a dos servicios y derechos básicos a los cuales el gobierno FA se propone ajustar.
Claudio Álvarez
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