jueves, 22 de octubre de 2009

El 25 metele el voto a la Asamblea Popular



"...Un partido independiente que intenta colocarse en un centro que no existe porque en este Uruguay de hoy, las opciones son la derecha o la izquierda, y en ésta última, la izquierda, la opción es una: la Asamblea Popular."

Estamos a siete días de las elecciones nacionales. Cinco son las opciones políticas que se nos presentan. La oficial, representada por el gobierno del Frente Amplio, un partido que subió por la izquierda y bajó por la derecha. Que se desdijo en su hacer de toda una historia de lucha y de construcción de una alternativa antiimperialista y antioligárquica y terminó dándole asado a George Bush, con los integrantes de sus gobierno, terminó abrazándose con los latifundistas;
nacional y terminó vendiendo al extranjero nuestras mayores riquezas: la tierra, la industria frigorífica, el agua, los minerales, los puertos y aeropuertos, las carreteras y hasta la principales arterias de la ciudad; popular, y abriendo cuanta universidad y escuela privada pudo; con 700 mil pobres, profundizando la brecha entre ricos y pobres. O sea que votar al oficialismo es al santo pepe
La tradicional, la de blancos y colorados que nos siguen ofreciendo la misma receta de siembre y que hoy disputan de igual a igual con el Frente Amplio como una única y misma propuesta.
Un partido independiente que intenta colocarse en un centro que no existe porque en este Uruguay de hoy, las opciones son la derecha o la izquierda, y en ésta última, la izquierda, la opción es una: la Asamblea Popular.
La opción, que emerge distinta, diferente, legítima, la de la Asamblea Popular es la única que nos puede dar la posibilidad ahora sí, de comenzar a construir una alternativa socialista, cambios reales en una sociedad que quiere recuperar su dignidad, que se siente hermanada con los pueblos de nuestra América como nos enseñó Artigas, que rechaza el abrazo con el amo del norte; que busca la cercanía con sus iguales y no con los genocidas como Uribe o Netanyahu; una nación que busca recuperar su soberanía política y su independencia económica que perdió con las firmas de cartas y tratados con el Fondo Monetario, con el Banco Mundial, con el BID, con los Estados Unidos y Finlandia.
Es un momento difícil, para casi la mitad de los uruguayos que creímos en un cambio y recibimos más de lo mismo. Que trabajamos duro durante más de cuarenta años para construir un país distinto, solidario, con igualdad, del que nos pudiéramos sentir orgullosos, y hoy nos sentimos defraudados, avergonzados cuando vemos las imágenes de nuestros gobernantes abrazados con los poderosos, con la mano tendida para recibir limosnas; indignados cuando vemos que han prostituído la política y son hoy, una mala caricatura de Cantinflas.
En una semana hay que votar, y hay que hacerlo con conciencia, buscando restituir la esperanza, fortaleciendo un parlamento que actuó con cabeza y mano de yeso, que pasará a la historia por su incapacidad. Y para hacerlo debemos devolverle gente que cuando ocupó una banca lo hizo para defender los intereses de la nación, actuando con coherencia, sin entrar en las comanditas del poder, votando siempre junto al pueblo, y para el pueblo.
Y la Asamblea Popular da esa opción, con candidatos como Raúl Rodríguez, que se enorgullece de su pasado guerrillero, como Delia Villalba que enfrentó como nadie en este país, el poder de las multinacionales; como Helios Sarthou, el Senador que consiguió el respeto de la gente y del adversario por su coherencia, honestidad, por su lucha por los trabajadores y los más infelices.
El 25 de octubre los uruguayos tendremos la opción de poner a Sarthou nuevamente en el parlamento, y darle a la izquierda, a la única opción de izquierda, la posibilidad de demostrar que aún es posible el sueño socialista.
El domingo próximo votá izquierda, votá a la Asamblea Popular!

1 comentario:

Enrique Inzaurralde dijo...

Ché, todo bien, pero ¿y de dónde sacamos listas de asamblea popular para poder votar a Sarthou al senado?... Somos dos y no encontramos dónde hay listas y viste cómo es, es muy probable que, cuando vayamos al cuarto secreto, algún pelotudo, de esos fanáticos amanuenses frentistas (que no frenteamplistas, porque frenteamplista soy yo y por eso es que no los voto; por traidores) rompa o retire las listas de ap... Por eso, ¿dónde hay listas?