martes, 21 de octubre de 2014

Las diferencias sociales en el Uruguay son cada vez más grandes




La columna del demógrafo Guillermo Macció en ‘Contrapunto’, lunes 13 de octubre de 2014

“La otra cosa, ya más de fondo, que quiero decir, es que las diferencias sociales en el Uruguay son cada vez más grandes, golpea los ojos”, dijo el demógrafo Guillermo Macció en su columna semanal en ‘Contrapunto’. En la oportunidad relató las experiencias recogidas durante los tramos en que acompañó la recorrida realizada por integrantes del Partido Humanista por todo el país. Transcribimos la nota completa, que Usted puede volver a escuchar aquí:
http://www.ivoox.com/guillermo-maccio-13-octubre-audios-mp3_rf_3605354_1.html

Efraín Chury Iribarne: Oyentes, hoy es lunes, es el día en que dialogamos con Guillermo Macció a quien ya estamos dándole la bienvenida. ¿Guillermo, cómo estás?
Guillermo Macció: Buenas tardes Efraín, buenas tardes a la audiencia, un gusto reencontrarnos como todos los lunes y acá estamos con mucho entusiasmo, con menos energía pero...
EChI: Menos energía porque tal vez las giras largas bajan la energía física pero a uno lo dejan contento.
GM: Sí, yo no tengo el mérito de los compañeros porque me bajé del tren en Tacuarembó y recién me volví a subir el sábado en Barros Blancos y en Pando, y ayer en Santa Lucía. Entonces, en mi mérito tengo el boleto recortado.
Pero sí tengo vivencias y resúmenes para compartir con la audiencia que no tuvo la experiencia y que me parece que deja muchísimas enseñanzas, muchas lecturas, mucho aprendizaje y porque además constituye en un proceso preelectoral una novedad absoluta. Estar de cuerpo presente en las esquinas de todas las capitales y una veintena de pueblos hablando con megáfono, con una cartelera y con banderas desplegadas. Eso no lo hizo ningún partido.
Entonces yo quería, un poco para documentar la experiencia, antes de que se desvanezcan algunos ribetes, compartirlo.
EChI: Me parece bárbaro.
GM: Yo creo que el procedimiento creado, puesto en práctica por los compañeros del Partido Humanista, con la adhesión de la Unidad Popular ha sido una estrategia sumamente innovadora y exitosa.
¿En qué consistía? En dos camionetas, unos que fuimos por el norte del país y partimos por Bella Unión y bajando por Artigas, Rivera, Tacuarembó, Cerro Largo, Minas y llegando por ese lado.
Y los otros compañeros que partieron de Bella Unión, desde el punto inicial, bajaron por el Litoral, hicieron todo el Litoral y el centro-sur del Uruguay.
Dos camionetas equipadas, el equipamiento eran megáfonos, listas, unos exhibidores, unos cartelones grandes que se enrollaban donde estaban los principios de la Unidad Popular y otro con una síntesis del programa.
Las banderas correspondientes, la de la Unidad Popular y en este caso la del Partido Humanista, y 4 ó 5 compañeros o compañeras, el grupo nuestro tenía una integración de aproximadamente 5 personas.
Primero se hacían los contactos para las entrevistas televisivas y radiales, que fueron en algunos lugares muy exitosas, como en Artigas por ejemplo. Y el soporte en los lugares donde había referentes básicamente del 26 de Marzo, que cumplieron una labor preparatoria y de contacto con la prensa previa extraordinaria. Que son las bases estables, pero no en todo el país, allí donde hay una presencia desde hace tiempo. Los veteranos militantes, los referentes que hicieron los contactos previos con la televisión. Ejemplos impresionantes como en Artigas donde las entrevistas se hicieron en la plaza con los canales de cable de la ciudad y la pasaron dos veces en el día, por lo tanto a uno los ciudadanos lo reconocían en la calle.
Bien, entonces, para ser ordenados, el procedimiento, y por supuesto, el orador, el predicador, el que tenía el sketch armado era básicamente Daniel Rocca en el grupo que me tocaba. Que hablaba con un megáfono en la esquina de la plaza, a diferencia de los otros partidos que tenían una camioneta con mucho despliegue de listas, mucha cartelería, muchas banderas pero grabaciones con sketch meramente publicitarios de vote a tal lista, vote tal otra o vote tal otra, que al final eso terminaba aburrido.
Esa fue más o menos la tónica permanente. Una cifra, entre los dos vehículos más o menos se recorrieron 6.600 km en el Uruguay. Todas las capitales del Uruguay y más o menos una veintena de pueblos y ciudades.
EChI: Eso es como ir a Venezuela en avión casi.
GM: Más o menos.
Es decir, para que la audiencia se dé cuenta del esfuerzo intenso, muy estimulante, porque uno veía el progreso. Así que el itinerario fueron esos, dos brazos que se armaron y que se recorrió todo el país.
Yo no tengo mérito 100% porque de Tacuarembó regresé a Montevideo para la audición pasada, me reintegré el sábado a Barros Blancos y a Pando, donde fue una experiencia que tampoco tenía en el área cercana a Montevideo y ayer casi todo el día en Santa Lucía, que fue presencia para el miércoles que culmina la caravana acá en Montevideo. Ahí se cierra el ciclo, los compañeros están todavía en la periferia de Montevideo y la zona que se llama del Santoral recorriendo hoy y mañana.
Entonces, primera cosa, he hablado del itinerario. El itinerario significa una consecuencia no despreciable, que lo puedo decir con fundamento, hoy la Unidad Popular, la Asamblea Popular tiene presencia reconocible nacional. En todos lados hay un reconocimiento porque hay una vivencia directa, no es una abstracción, ya saben quiénes son, nos vieron, conocen y se ha hecho una profusa difusión en la prensa, donde se ha podido, que es muy importante.
La prensa, con muy pocas excepciones, salvo en Durazno, se ha portado muy bien con nosotros. Muy generosa, muy abierta, sin cortapisas.
Entonces, para nuestros militantes que no han tenido la vivencia, que están escuchando la radio, saber que hoy la Unidad Popular y cada uno de los partidos que la forman, tienen presencia nacional. Eso a mí me parece que es muy importante.
Ya reconocí y vuelvo a insistir el aporte invalorable de los referentes que desde antiguo están en algunos lugares del país, que básicamente son militantes del 26 de Marzo, gente ya veterana, mayores, pero que son muy conocidos y conocen los lugares. Entonces, son unos guías perfectos para conducirnos.
Pero eso no ocurre en todo el país, en algunos lugares éramos debutantes absolutos, regalados en la plaza ahí con nuestra presencia.
En tercer lugar quiero hacer un reconocimiento especial a Néstor Pérez, llamado Noni, el chofer de la camioneta, que no conociendo el país, viajamos normalmente de noche, un trabajo infatigable, kilómetros y kilómetros arriba cada día aparte del trabajo logístico. Comiendo más o menos y durmiendo a veces bien y más o menos regular.
Así que en esta experiencia se manifestó una idoneidad de convivencia y un compañerismo entre gente que no conocíamos, o yo no conocía y ellos me conocían a distancia. Ese es un tema muy importante.
El otro tema es lo que yo llamo "el efecto Gonzalo".
El efecto Gonzalo después del ateneo de la televisión organizad por ANDEBU. Ese efecto produjo en el electorado uruguayo un cambio cualitativo y cuantitativo, porque nos aburrimos de escuchar que el único que había dicho cosas que valía la pena en la cadena de televisión era Gonzalo. Y nos pasó en Barros Blancos y nos pasó en Santa Lucía y otros lugares.
La gente decía: -¿Ustedes son de la lista de Gonzalo o el hombre de la boina o el hombre de los lentes?
-El de los lentes.
-Bueno, deme la lista porque es el único que vale la pena votar.
Así, uno se quedaba estupefacto. O llamarme desde Paysandú, gente que conocía, decirme, mirá, yo estoy mal contra el Frente porque nos defraudó y que esto y que lo otro, mi mujer y yo vamos a votar, pero hay 4 compañeros del Frente que decidieron votar con nosotros, decime dónde se consiguen las listas.
Es decir, hay una efervescencia que no es casual, que no es por generación espontánea sino un cultivo de conciencia. La gente va despertando y se va dando cuenta, de a poco, con resistencias. Pero hay un estado colectivo de conciencia, de presencia y de reconocimiento que la Unidad Popular ofrece una alternativa que vale la pena. Y eso está pasando en todo el país.
Por eso el efecto Gonzalo, y el efecto Gustavo complementariamente, es el esfuerzo gigantesco. Hay que recordar que Gonzalo Abella ha hecho 4 giras por todo el país, a pulmón. Y uno se conmueve, cuando va a una plaza perdida de un pueblo está ahí flotando el retrato de Gonzalo, que era el respaldo publicitario que algún compañero podía colocar. De una pobreza extrema que tenemos a ganar espacios progresivos. Nada más que a coraje. Yo me sorprendía de mí mismo, estar 3 horas parado en una plaza con una bandera en un brazo y la otra en el otro, porque yo no iba a usar el megáfono, eran otros compañeros que lo hacían.
Pero esa presencia colectiva de grupo, de imagen, de tiempo plantados ahí, y de hablar con la gente que se acercaba, fue una gimnasia realmente muy importante.
En quinto lugar, quiero reconocer y dejar por sentado el respeto recíproco con los otros partidos, ellos nos respetaron y nosotros los respetamos. En todas las ferias íbamos a la esquina estratégica. En Tacuarembó, en Barros Blancos, donde fuere, hay esquinas estratégicas en las ferias que los lugareños conocen perfectamente, por ahí pasa todo.
EChI: Sí, claro.
GM: Inexorablemente estaba una camioneta del Frente con su publicidad, los militantes y una grabación pasando por altoparlante los eslóganes.
En la otra esquina no había una camioneta sino 3 camionetas, más modernas de Lacalle, demostración de una infraestructura publicitaria formidable, pero era la misma técnica, un jingle musical, un eslogan, grabación y dele y dele.
Y nosotros, en la otra esquina, con la estrategia que expuse, un hombre parado, en nuestro caso el propagandista verbal era Daniel Rocca, y los compañeros y compañeras que con el apoyo logístico, repartir listas, repartir publicidad, atender a la gente que se acercaba y con las banderas siempre flameando. Los símbolos estuvieron siempre flameando.
Nunca hubo ni una agresión, ni un gesto, al contrario, saludos. O sea que en la militancia de base había un respeto. Hay dos excepciones, pero que no hacen a la militancia, que luego relataré.
Eso me parece importante porque creo que vale la pena destacar que aunque las cúpulas sean muy soberbias, muy poseídas del poder, muy poseídas de la verdad, iluminados algunos, en la militancia hay un reconocimiento, un respeto más o menos bueno.
¿Qué más les puedo decir? Encontramos dos situaciones conflictivas, encontraron porque una no nos sucedió a nosotros sino a los compañeros de la otra caravana integrada mayormente por mujeres, por compañeras del Partido Humanista que tuvieron que cubrir Durazno.
Durazno tiene una tradición lamentablemente autoritaria, si hay algún duraznense que conozca que me perdone pero es un núcleo fascistoide. Y estaban las compañeras sentadas doblando listas en la plaza y se les apersonaron 4 policías a prepo pidiendo documentación, como si fueran vagabundos sospechosos, a prepo. Y un policía, el más malo, haciendo ostentación de la autoridad y comunicándose con la Jefatura contando el procedimiento que estaba haciendo.
Claro, no pasó nada pero la actitud, pedir documentos en la plaza pública a gente que estaba.
EChI: Sigue enfermo de riverismo.
GM: Más o menos, un poquito más también, de florismo diría yo, de Venancio Flores.
Ese es un caso.
Y el otro que yo llamaría, con todo respeto pero no puedo esquivar el apelativo, y se lo dedico a los oyentes de Santa Lucía, el pintoresco alcalde de Santa Lucía y su plaza vedada al populacho. Porque la plaza acaba de ser remodelada, la plaza de Santa Lucía, entonces está hermosa.
EChI: ¿La plaza está vedada?
GM: La plaza acaba de ser remodelada por obra de este señor alcalde, incluso tiene árboles de la flora autóctona, lo que me parece muy encomiable, precioso, la plaza está preciosa.
Pero el señor quiere que el populacho no la use, entonces tiene prohibida cualquier manifestación, cualquier cartelería, cualquier puesto de venta que altere la limpieza de la plaza, uno puede ir a sentarse, nada más. Es decir, al señor alcalde le molesta que la gente vaya a la plaza, mucho.
Me parece bien que esté pulcramente cuidada, ahora, no hay depósito de basura porque se supone que nadie tira la basura. Está impoluta la plaza.
Y allí estaban los compañeros que desembarcaron con la camioneta, en la orilla, bien estacionados, bajaron sus artefactos y vino en persona el alcalde a expulsarlos, de mal humor, domingo en la mañana. Y empezó de una manera ostensible a hacer demostración de su autoridad.
Tanto se exaltó que la señora le decía: No, no te enojes que te puede hacer daño al corazón.
Un bochorno.
Pero sucede que al mismo momento que había pasado esa escena, de persecución ideológica en realidad, porque otra vez las compañeras lo que hacían era sentarse en el banco y plegar las hojas, las listas, otra cosa no había, ni la cartelería estaba. Estaba el megáfono en la esquina por el que hablaba el compañero. La camioneta estacionada, como correspondía, con sus banderas.
Pero resulta que a la sociedad patriótica de Santa Lucía, por mala suerte o no sé por qué misterio, se le ocurre hacer el desfile gaucho con una caballada no despreciable calculo de 600, 700 caballos, el día 12 de octubre. ¿Un homenaje a Artigas un 12 de octubre? Parece una tomada de pelo, un homenaje a Artigas el 12 de octubre. Y copan la plaza, la caballada circunvala la plaza y el gauchaje desmonta y la plaza se llena de gente, pero ahí no había discriminación, la plaza quedó colmada de gauchaje. Un 12 de octubre al pie del monumento a Artigas haciéndole un homenaje a Artigas. Yo no podía entender, nadie me pudo explicar por qué el 12 de octubre. Porque si saben lo que significa el 12 de octubre hoy en la realidad, da vergüenza.
Alguien me explicó que era porque usualmente en octubre hacían el desfile.
O sea, este señor alcalde, a quien le mando el mensaje y ojalá si no lo escucha se lo transmitan, tiene que revisar su conducta porque tiene, aunque él no se dé cuenta rasgos fascistoides.
Que siga cuidando su corazón pero que se mire al espejo porque tiene, no un enano fascista, tiene un cuerpo más crecido que el de un enano en su espíritu.
Son dos anécdotas que yo no quiero dejar pasar porque en un estado democrático como en el que estamos, en elecciones libres, con libre ejercicio de los partidos, el espacio público quiere decir para todos.
EChI: Sí, hay que entender eso, es lo primero.
GM: El espacio público es para todos, cuidado.
Me hubiera gustado encontrarme con él para invitarlo a un debate público sobre el asunto.
Además, y como paradoja, varios de los dirigentes del Partido Humanista son oriundos de Santa Lucía, o sea que estábamos rodeados de familiares de estos compañeros. Es una cosa bastante singular porque se paraba gente a saludarlos a ellos, porque criados, educados en la escuela y todo.
Bueno, la otra cosa más de sustancia que quiero decir, estas son experiencias que yo quiero transmitirle a la audiencia porque la modalidad que se ha aplicado en esta campaña es absolutamente innovadora, con muy pocos recursos, que es la presencia en la gente.
Ir a las barriadas, ir a los pueblos marginales, ya lo conté en la audición anterior, meterse a hablar, para mí es mi primera experiencia también, lo confieso sin retaceos. Por supuesto no tengo la gimnasia que otros compañeros tienen.
La otra cosa, ya más de fondo, que quiero decir, es que las diferencias sociales en el Uruguay son cada vez más grandes, golpea los ojos. El Uruguay del Río Negro para el norte, y sobre todo los departamentos limítrofes con Brasil, tienen una influencia de desarrollo, de higiene, de consumo y de comportamiento que viene de Brasil. Hay una diferenciación manifiesta, porque el ejemplo que tiene esa gente son los brasileños del otro lado de la frontera. Y el Brasil incuestionablemente, aun en la frontera muestra indicios de desarrollo y de bienestar muy importantes, que los orientales fronterizos los imitan.
Y uno lo ve, en el comportamiento de los ciudadanos de Artigas, de Rivera, de Tacuarembó, de Cerro Largo, tienen un comportamiento con influencias brasileñas que los beneficia en el sentido de tener un poco la mente más abierta porque ven otro mundo.
EChI: Ven otro mundo.
GM: Ven otro mundo, y por inercia un poco los imitan. Una compañera nuestra en Tacuarembó, vendedora de unos bozos uruguayos de la mejor marca que hay y de frazadas de la única marca que queda, ella hablaba un lenguaje de comercio que no es habitual acá en el sur. Porque tenemos que reconocer, primero, que el proceso de desarrollo de Brasil es más rápido y más intenso que el del Uruguay y en consecuencia el vecino influye sobre el que está del otro lado de la calle, naturalmente. Es un proceso que se lo ve.
Hay elementos agravantes que uno no los puede entender. La Ruta 30 que nace en Artigas y va a Rivera y que pasa por la Bajada de Pena y por Masoller, está intransitable. Y el 90% de los uruguayos cruzan a territorio brasileño y van por la ruta brasileña de Artigas a Rivera, porque la vía natural no está en buenas condiciones. Y cuando los vecinos se apersonaron a un ministro de Obras Públicas, alguna vez que lo vieron, les dijo: ah, tienen que esperar 15 años para que esto se haga.
Entonces, hay un aislamiento físico entre Artigas y Rivera por territorio uruguayo, Ruta 30, repito, que no está en condiciones de circulación adecuada para la comunicación entre dos capitales vecinas. Eso es grave, eso es abandono por desidia de la soberanía nacional.
Después de dicho esto sobre el Uruguay cercano a la frontera, también tengo que hablar con dolor del Uruguay cercano a Montevideo.
La impresión que uno tiene como la que yo percibí después de viajar por la periferia de Montevideo, por las zonas de convergencia, lo que podría ser el área metropolitana y estando acostumbrado a recorrer periferias de América Latina, el aspecto que presenta Barros Blancos, Pando, la zona de Santa Lucía, en Santoral, es deplorable. El estado de abandono de la infraestructura.
Tal vez los ciudadanos que viven allí, como viajan todos los días, no lo perciben, pero el contraste es aterrador. El contraste de abandono del espacio público, de abandono de baldíos, de depósitos inconmensurables de chatarra, de camiones de autos abandonados, de tambores, de desechos industriales, de cualquier naturaleza, de galpones vaciados donde hubo fábricas otrora, es impresionante.
Yo viajé una parte por la Ruta 5 vieja, que pasa por La Paz, Las Piedras, Cesar Mayo Gutiérrez se llamaba en otra época, los aledaños son los que yo veía hace 40 años, 50 años cuando iba a facultad y vivía en Florida y era un guachito que venía todos los fines de semana a comer bien en la casa de mis padres. Eso está peor que antes.
Todo lo que es hacia el este, Pando. Pando es una ciudad de muchísimo movimiento pero el estado de su urbanización es deplorable.
EChI: Si será.
Y ha empeorado.
GM: Bueno, y se nota más porque como ahora hay carreteras perimetrales, transversales para carga, para transporte rápido, para escape rápido de toda la zona, cuando uno se adentra en las manzanas, en las barriadas caminando, ve qué deplorable estado de abandono. El departamento de Canelones es una gigantesca tapera urbana, así de simple. Lo digo con una absoluta convicción de imágenes registradas en Barros Blancos, en Pando, en la Costa, en el Santoral, en Santa Lucía por adentro. La propia ciudad de Canelones, de las capitales que he visitado que son todas, es la peor mantenida, la más sucia, la peor señalizada.
EChI: Sí, totalmente cierto.
Digo esto porque esa la he visto.
GM: Bueno, entonces uno dice, qué lindo que está Artigas, qué lindo que está Tacuarembó, la gente orgullosa. Ni qué hablar de Paso de los Toros, una ciudad bellísima.
Artigas, una ciudad pulcra. Y cuando uno baja, es como en un desaguadero de una pileta de cocina que está lo que se va depositando en la cloaca. Ese embudo cuyo punto central es la periferia de Montevideo que se irradia tanto para el este como para el oeste.
La periferia urbana de Montevideo, que obviamente es el departamento de Canelones, tiene una estructura urbana de señalización de acueductos, de alcantarillado, todos los arroyos putrefactos, todos. Todos los cursos de agua están putrefactos.
¿Ahora, cómo es eso en una capital de apenas 1.300.000 habitantes? Es decir, hay una inercia urbana.
EChI: Hay un estado más bien de postración.
GM: De postración. ¿Pero quiénes son las víctimas? Los ciudadanos que la habitan y que pagan sus impuestos, que viajan.
Para peor anduve en un ómnibus que se mete por las carreteras viejas para servir de transporte suburbano e interurbano, que se mete por calles viejas o recorridos viejos y uno ve la parte escondida de las ciudades. Y la parte escondida de las ciudades muestra que hubo un florecimiento en la zona de Colón, por ejemplo, Peñarol de los años 1930, 1940. Todo lo que sigue después es vetusto.
EChI: Sí, es decadencia.
GM: Es decadencia. Y más que decadencia es deterioro.
Y millones de personas viven en esas condiciones, pero esas millones de personas pagan millones y millones de pesos en los impuestos municipales que hablan de una gestión municipal terriblemente precaria, mala, dilapidadora de recursos.
Y la gente se resigna. Que además gasta horas de viaje en trasladarse al centro que es Montevideo que absorbe ese territorio.
Yo señalo esto porque ese es un tema que hay que instalar en agenda que tiene que hacer a la militancia política. Reivindicar el área metropolitana de Montevideo que es muy importante, y que es la gran devoradora de una masa de tributos gigantescos.
EChI: Bueno, veníamos hablando del aprendizaje que nos deja esta experiencia única.
GM: Yo creo que sí.
2 vehículos y en total 10 o 12 voluntarios, y luego el respaldo de los referentes locales que dieron su apoyo invalorable en los contactos y la prensa. Que no siempre existió, pero que funcionó.
EChI: Guillermo, naturalmente que eso a vos te debe haber dejado una experiencia muy buena y la estás compartiendo. Y te debe haber dejado la impresión de que no todos vivimos en el mismo Uruguay y que hay más Uruguay que el que a mí me toca vivir.
GM: Exactamente.
Hay, a grosso modo, yo me atrevería a decir, y esto no es verdad ni mucho menos es opinión e impresión leída con ojos de gente que está acostumbrada a viajar, que hay hoy tres Uruguay.
El Uruguay del norte, incluyendo Tacuarembó hasta Tacuarembó, que tiene una influencia manifiesta de Brasil. Hay que recordar que esa parte, hasta hace 20 años uno iba a la frontera a comprar ticholo y guayabada, o neumáticos brasileros de contrabando. Bueno, ese Brasil cambió sustancialmente, y hoy la potencia agrícola de Brasil es el Estado de Río Grande do Sul, que es un Estado próspero.
Y hay que ver cómo compran los brasileros en la gigantesca cantidad de free shops que hay en Rivera. Yo estuve hace 2 años y se triplicó la cantidad de free shops, más bien uno tiene que buscar dónde no hay un free shop para ver que haya algún comercio.
Entonces, esa influencia viene bajando. Viene bajando, ni qué hablar a los que tocan la frontera pero a las cercanías. Incluso en el sector productivo, la vestimenta y los usos agrícolas y de los estancieros, tiene influencias brasileñas. No está más la estancia cerril, uno lo ve por los portones y por los alambrados que normalmente no están hechos acá esos.
Ese es un Uruguay, el del norte, con gente de buen humor en todos lados y bastante más barato que Montevideo, bastante más barato.
Después están las ciudades que yo definiría paralizadas en el tiempo, cuyos dos elementos, la primera más al norte es Florida. Florida es una ciudad, hablaba con mis familiares, la conozco bien, está detenida en el tiempo. En Florida la gente se muere, no va nadie a vivir, más bien la gente se queda ahí hasta morir.
Eso sí, tiene una confluencia de culturas, está cerca de Montevideo pero no tanto entonces hay un sólo restaurante para comer, hay un sólo hotel para quedarse. Dejo afuera a Durazno porque Durazno es un baluarte reaccionario, tiene sus características muy propias, en muchos aspectos sigue todavía el caudillaje político duro.
Y luego está en la tercera parte del Uruguay -excluyendo los enclaves lujosos como son Punta de Este, el entorno de Maldonado y algún otro lugar más- que es la influencia periférica de Montevideo sobre su entorno tierra adentro. Montevideo tiene influencia para el este, el norte y el oeste, no tiene para el sur. Y eso que es esencialmente Canelones, se ha montevideanizado. Uno piensa más que está en Montevideo que en Canelones. Porque todo confluye, hay que mirar las líneas de transporte, convergen todas hacia Montevideo.
Es un drama ir de San Bautista o de San Ramón a Santa Lucía, pese a que están en el mismo departamento no hay ninguna línea que conecte horizontalmente localidades del mismo departamento.
Pero Montevideo devuelve a esa región, el área metropolitana, sus miserias, su exclusión, su falta de servicios básicos, su inseguridad, sus Intendencias corruptas de décadas con presupuestos que no fueron volcados al interés ciudadano, y eso es muy fuerte. Montevideo, con su miseria y su marginación, es mucho más grande que su población. Es Montevideo y más.
Y toda esa zona que la circunda, donde vive muchísima mano de obra que converge a Montevideo, por eso hace un sistema de transporte tan absurdo.
EChI: Más absurdo imposible.
GM: Están superpuestas las líneas, están superpuestas las compañías, están superpuestos los recorridos y hay bolsones de aislamiento absoluto donde la gente tiene que caminar cuadras y cuadras, porque las empresas son privadas y buscan su lucro.
Entonces, por una calle circulan 20 líneas, por otra 20 líneas y por otra ninguna. Y es un sacrificio de hora y de esfuerzo cotidiano de miles de ciudadanos periféricos.
EChI: Son incapaces de prestar un 121 de los tantos que sobran.
GM: Ah no, claro, porque hace a una concepción centralista y capitalista del negocio del transporte que es atroz.
Y yo anduve en esos ómnibus, la infinidad de kilómetros que se recorren en vericuetos dando vueltas en las esquinas que es todo un absurdo. El sistema de transporte colectivo que converge a Montevideo es absurdo, pero para el negocio es muy lucrativo, más el subsidio que perciben.
Pero el que paga eso cotidianamente con horas de su vida y miles de peso de sus bolsillos, es esta tercera parte del Uruguay que es Montevideo y su área metropolitana. Degradada, no hay un sólo arroyo que pueda salvarse.
Desde bidones de aceite flotando, estiércol de toda especie. Pero eso va muy arriba, eso va a los afluentes del río santa Lucía. Y esa percepción de la degradación ambiental que lleva a la degradación habitacional, la cantidad de casas deterioradas que hay en el entorno y de calles deterioradas, no puede resurgir eso si no hay una política de Estado de transformar y hacer digna la periferia de Montevideo.
El contraste que hay entre la Rambla de Montevideo, Pocitos y el contraste que hay con las zonas periféricas, es mucho más fuerte que el que hay entre Lima y la sierra. La mortalidad infantil más baja está de Av. Italia para la Rambla.
La mortalidad infantil más alta del Uruguay está de Av. Italia para el norte. no hay que irla a buscar a los pueblos perdidos que ya no existen, no, ese es el karma, la vergüenza de Montevideo, que alberga en su territorio los extremos de la mortalidad infantil y también los extremos de la riqueza y la pobreza.
Y para ser generoso podemos decir, de Av. Italia a la Rambla y de 18 de Julio hasta el arroyo Carrasco, en ese rectángulo, ahí está el primer mundo con todo. Y cruzando Av. Italia con la extensión que se quiera está el cuarto mundo. Esa desigualdad social que se acumula por el abandono de la función pública municipal sobre la cual nadie ha intervenido políticamente de verdad, es atroz. No hay que ir lejos para buscar lo peor del Uruguay, está acá a la vista.
Y esa es una exclusividad dolorosa de la realidad social y económica del Uruguay de hoy.
Y sobre eso tenemos que trabajar, pensar, discutir y analizar.
EChI: Sí, sí, nos va a todos eso en la responsabilidad.
Pero es así, del primer al cuarto mundo en Uruguay se puede ir a pie.
GM: Sí señor, muy bien, la figura es perfecta, se puede ir caminando.
EChI: Guillermo, nos tenemos que ir.
GM: Bueno, terminamos, y nos queda una sola audición preelectoral que es la del próximo lunes.
EChI: Bueno, nos referiremos a esas cosas. Muchas gracias.
GM: Después hablaremos de otros temas que hay una agenda inmensa. Hay que celebrar el triunfo de Evo. El triunfo de la cultura aymara sobre la cultura criolla, no es poca cosa.
Bueno, muchas gracias.
EChI: Muchas gracias a ti, Guillermo Macció.

No hay comentarios: